Los hermanos Clemente, Miguel Ángel, y Javier, han inaugurado esta tarde una exposición de algunas de sus obras, con motivo del 60 Aniversario de Ferrocle, la empresa familiar que ambos gestionan.
Ante un centenar de autoridades, amigos y clientes, Antón Castro, escritor, periodista y amigo personal de Miguel Ángel y Javier, ha sido el encargado de presentar el acto. Castro ha comentado como conoció esta empresa de Monzón en 2006. Y cómo le llamó la atención la pasión de estos artistas del metal por la línea recta y la curva, plasmadas ambas en obras en las que muestran su gusto por Cervantes, por la tauromaquia y como no por el Real Zaragoza.
A este club de fútbol, a los que los dos hermanos están muy unidos, le regalaron un escudo realizado en metal y en la exposición que hoy se ha inaugurado se muestra una impresionante maqueta del estadio de La Romareda.
En la muestra se pueden contemplar algunas esculturas del año 1956, realizadas por Miguel Clemente, padre de los dos actuales propietarios de Ferrocle y fundador de la empresa. Según Castro, algunas de estas obras, de mediados del S.XX, poseen ciertos aires de «arte óptico», lo que las convierte en esculturas realmente modernas. «Pasión por el trabajo y la profesión son parte del legado que dejó el creador de esta empresa a sus hijos.
Jaime Peralta, comisario de la exposición, ha sido el encargado de seleccionar las piezas que se pueden contemplar, de entre las innumerable piezas que atesoran los hermanos Clemente.
Son un total de 80 piezas las que se muestran, expuestas en dos partes. Por un lado, cerrajería artística y en segundo lugar obras de forja. La presentación ha tenido lugar en el taller, calificado como «laboratorio inicial». Peralta ha realzado el valor y la capacidad de sincronizar y complementar los valores entre ambos hermanos a la hora de crear y trabajar.
Miguel Clemente, en su discurso, ha recordado la figura de su padre. El legado que les dejó así como las enseñanzas. Clemente ha explicado que han sido muchas las ofertas que han recibido por algunas de sus obras, todas de ellas desestimadas, ya que para ellos hay piezas que no tienen precio.
Hay obras de la familia «Ferrocle» por los cinco continentes, incluso la Reina Sofía es propietaria de un par de ellas.